RIMA VIII
Atardeciendo en Castilla,
muere el sol sobre las nubes
grises, pardas, blancas.
Baila la hierba
un tango desconocido
al son de la música
que tañe el aire que la mueve.
El árbol se refleja, claro,
en el espejo del lago.
Y, de pronto, del dorado astro,
moribundo, extenuado, gigante,
un rayo de fuego se escapa,
tiñendo de escarlata
el cristal del agua,
que se muestra, por un instante,
como un campo
de cenizas ardiendo.
Atardeciendo en Castilla,
muere el sol sobre las nubes...
Cambiaremos el mundo con las palabras.
Con nada más que decirle al mundo. Un saludo.
5 comentarios:
No se si habías visto esto FYI
http://morerescultural.blogspot.com.es/2012/04/poesia-viva.html
Cada vez estoy más convencido de lo que escribes.
Bien. Me gusta.
No lo he visto, Fuly, pero voy a verlo ahora mismo.
Jeje! Cuando te escribi el mail aun no habia visto esta entrada! Olvida el ultimo parrafo.
Genial!! Espero seguir leyéndote más cosas como esta!! Un fuerte abrazo...
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