Empecemos fuerte. Un nuevo movimiento, ¿por qué no?

He visto recientemente una película que puedo decir con orgullo que es, si no mi preferida, una de ellas.

Como ya habréis adivinado por la fotografía, se trata de ''El Club de los Poetas Muertos''. No sé si es necesario que explique el argumento, ya que es un film conocido por todos. Pero bueno, la resumiré a grandes rasgos.

La acción se desarrolla mayoritariamente en un colegio en los años, ¿60?, en el que se sigue una férrea disciplina. Los protagonistas son un grupo de unos seis u ocho estudiantes de 16 años aproximadamente. El asunto comienza cuando llega al colegio un nuevo profesor de Literatura, que les hace cambiar el enfoque que tienen de la asignatura, y que busca formar a librepensadores, no a meros estudiantes. El problema se ve venir. El profesor Keating (así se llama este personaje, interpretado por Robin Williams) es un amante del Romanticismo, y en un ambiente tan disciplinario, se produce un efecto que tiene un final algo trágico.

El Romanticismo... Los estudiantes, siempre sujetos a una disciplina rigurosa, asumen las ideas románticas absolutamente. Se creen dueños del mundo, y, bajo el lema renacentista ''carpe diem'', se lanzan a sacar a la vida todo el meollo, dan a sus vidas y a sus pasiones altas y nobles toda la importancia. Ese es precisamente el problema de este movimiento literario, que se cierra terminantemente a cualquier trascendencia, buscando el Cielo en la tierra, y, al no encontrarlo, las consecuencias son de esperar.

Propongo yo, aquí, ahora, en este blog tan afamado y conocido (entiéndase la ironía), crear el Romanticismo Moderno. Ilusionémonos por las cosas de la Tierra, por las cosas buenas, como la música, la literatura, la poesía en especial, las artes humanas. Pero sabiendo que no son lo único que hay, que el asunto sigue, no en este mundo. A la juventud nos falta el ser un poco más románticos, salir de nuestro ensimismamiento materialista y buscar esas artes humanas. Creemos ''el Club de los Poetas Vivos'', porque lo nuestro es la vida.

Sin nada más que decirle al mundo. Feliz año nuevo.